Lecciones para adultos: "Crecer en Cristo"

Edición para maestros. Cuarto trimestre (octubre-diciembre) de 2012

Lección 7: "“Armarse” para la victoria"

Para el 17 de noviembre de 2012

 

Enseña a tu clase | Bosquejo de la Lección | Resumen
Ciclo de Aprendizaje:
Motiva | Explora | Aplica | Crea

 

El sábado enseñaré...

 

Enseña a tu clase a:

Saber describir cómo cada pieza del armamento que provee Dios es esencial para un soldado en su ejército.

Sentir el honor que Dios confiere a sus soldados al elegirlos para pelear en su causa.

Hacer: Ponerse la armadura de Dios, confiando plenamente en su protección mediante la oración.

 

Bosquejo de la Lección

1. Saber: Toda la armadura

   1. ¿Por qué cada pieza es crítica en la armadura que Dios provee?

   2. ¿Qué clase de ataques del enemigo es anulada por cada pieza de la armadura?

2. Sentir: Honrados por pelear del lado de Dios

   1. ¿Cómo usó Cristo la misma armadura que proveyó a sus “soldados”?

   2. ¿Por qué se considera un honor participar con el propio Hijo de Dios en la batalla contra el mal?

3. Hacer: Vestir la armadura

   1. Aunque la armadura es de Dios y nos protege, ¿cuál es el deber del soldado al mantenerse firme contra el maligno?

   2. ¿Por qué es importante la oración al vestir la armadura de Dios y usarla?

 

Resumen

Por medio de esta armadura, Dios provee protección y estrategias tanto ofensivas como defensivas en la guerra contra Satanás. Sus soldados han de ponerse esta armadura y mantenerse firmes contra Satanás, dependiendo de Dios mediante la oración.

 

CICLO DE APRENDIZAJE

Concepto clave para el crecimiento espiritual: La armadura de Dios es algo que nos ponemos cuando aceptamos por primera vez a Cristo. Es vital tener cada día una relación dinámica y permanente con Cristo.

 

PASO 1: ¡Motiva!

Solo para los maestros: Esta lección debe usarse para comprender cada parte de la armadura espiritual que Pablo presenta, y el modo más efectivo de usarla. Estudiar el ejemplo de Jesús puede ayudarnos a hacer esto, y también a prepararnos para prever los ataques que Satanás usará contra nosotros.

Lectura de la Biblia – Ponerse toda la armadura de Dios: Pide a tu clase que lea Efesios 6:11 al 18, que habla acerca de la armadura de Dios. Pablo anima a los efesios a ser fuertes en el Señor y en su gran poder. En los versículos 11 al 13, Pablo hace una transición y pasa a dar consejos prácticos sobre cómo lograrlo. Siendo veterano en la guerra espiritual, el consejo de Pablo a sus compañeros soldados es el de ponerse la armadura de Dios. No obstante, esta no era una idea nueva. Ya antes, en 1 Tesalonicenses 5:8, Pablo se refiere a la coraza de la fe y el amor, y a la esperanza de salvación como yelmo. Y en Romanos 13:12, leemos que el día está cercano, y debemos ponernos las “armas de la luz”. Pero, Efesios desarrolla plenamente este concepto.

Es útil recordar que, al escribir esta epístola, Pablo estaba encadenado a un soldado romano. Día tras día, seguramente, veía la coraza, el yelmo, los zapatos de cuero, el escudo, el cinturón donde colgaba la espada y la espada misma. Es fácil imaginar que, bajo la influencia del Espíritu Santo, Pablo comparó lo que veía en el soldado con lo que los cristianos necesitan vestir para tener éxito en la guerra con el diablo.

Analiza: Basado en el pasaje anterior, ¿por qué es importante tener puesta todo el tiempo nuestra armadura espiritual? ¿Por qué es importante comprender que vestir “toda la armadura de Dios” es un estado activo y dinámico de vivir y de estar en Cristo? ¿De qué modo ponerse la armadura es una elección diaria y no algo que se hace una sola vez?

 

PASO 2: ¡Explora!

Panorama: Efesios 6:12 habla del tipo de batalla que afrontamos. Dice que nuestra lucha es contra principados, potestades, contra gobernadores de las tinieblas, contra las huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. Estamos en una batalla espiritual oculta que enfrenta a un enemigo real, aunque invisible.

Solo para los maestros: Las tres metas principales de esta sección son: a) comprender cada aspecto de la armadura de Dios y ponérsela; b) identificar cómo Satanás apunta especialmente a los convertidos; y c) desarrollar capacidades y hábitos que nos permitan pelear con éxito contra él.

Primero, anima a tu clase a explorar la armadura de Dios. Sabemos por la Biblia que, para ganar la victoria en una batalla espiritual, no se puede pelear en la carne. Debemos usar armas espirituales. Estas armas son:

El cinturón, que es la verdad; la coraza, que es la justicia; el yelmo de salvación, un don de Dios; el evangelio de paz, que son los zapatos que cubren los pies; el escudo de la fe, nuestra defensa clave; y la espada, que es la Palabra de Dios.

Comentario de la Biblia

Toda la armadura de Dios

(Repasa, con tu clase, Efe. 6:11-18).

Una vez vestidos con la armadura de Cristo, debemos mantenernos listos para la batalla. Pero ¿qué podemos esperar en la guerra que pelearemos con el diablo? Hay dos fuentes importantes a las que podemos recurrir para comprender lo que debemos esperar. La primera fuente es la Biblia, y la segunda es lo que sabemos de esta guerra por experiencia humana. Ambas fuentes proveen informaciones acerca de lo que debemos esperar y de cómo prepararnos a fin de estar listos para ello.

Exploremos primero lo que aprendemos de la experiencia humana. Aunque Satanás será perdedor en la lucha entre el bien y el mal, también sabemos que es astuto y no debemos subestimarlo. A su vez, tenemos ejemplos humanos en los que algunos de los mejores generales resultaron perdedores. Si consideras al general Erwin Rommel, “el zorro del desierto”, leerás de un general que fue más astuto que un ejército británico mejor armado y más numeroso, en la campaña del norte de África durante la Segunda Guerra Mundial. Unas de las tácticas que usó fue ubicar algunos tanques con ventiladores que levantaran polvo en el horizonte, para convencer a los británicos que el ataque vendría de esa dirección. Los británicos ubicaron los cañones antitanque en esa dirección para repeler un avance de Rommel. Pero, de repente, los verdaderos tanques y el ejército atacaron desde atrás, y la batalla terminó antes de comenzar. Este ejemplo muestra la clase de tácticas que podemos esperar. Satanás es un experto en señalarle una dirección equivocada a la gente.

La segunda fuente para consultar, y la más importante, es la Biblia. Aquí vemos historias que nos revelan qué es una batalla espiritual y cuáles son las tácticas del diablo. El adversario siempre pelea en condiciones óptimas para lograr su éxito y nuestro fracaso. Y hay una estrategia común que Satanás siempre utiliza con éxito: procurar desviar nuestra percepción de sus métodos, y echar la culpa a otros por el mal que él causa. Génesis 3:1 al 5 ilustra esto con la serpiente en el Jardín del Edén. Al tentar a Eva, Satanás la convence de que los motivos de Dios eran dudosos y cuestionables, y no los de él, y que Dios quería retener la divinidad, el conocimiento y la inmortalidad para que Adán y Eva no la tuvieran.

Considera: ¿Cómo usa Satanás la distracción y la desviación en sus ataques contra nosotros? De acuerdo con la Biblia, ¿qué fuentes de protección nos da Dios? Enumera las diferentes piezas de la armadura espiritual de Dios, y sus funciones. ¿De qué modo cada pieza de la armadura espiritual protege de las flechas de temor, de duda, de impureza, de ira, de impaciencia, de codicia, etc.?

 

PASO 3: ¡Aplica!

Solo para los maestros: Anima a tu clase a mirar en la Biblia otros pasajes para ver el desarrollo de la batalla espiritual. Considera el ejemplo de Jesús cuando el diablo desató contra él toda la potencia de su ataque. La mayoría de estos ataques venían por medio de personas. Observa: a) la familia de Jesús: algunos pensaron que estaba loco (Mar. 3:21), aun sus propios hermanos no creían en él (Juan 7:3-5). b) La nación judía: “A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron” (Juan 1:11). c) Sus discípulos: Tomás el incrédulo (Juan 20:19-31), el traicionero Judas (Luc. 21:37 a 22:6), y aun el formidable Pedro (Mar. 14:66-72).

Imagínate que los más cercanos a ti duden y procuren destruirte insidiosamente. Como ejemplo, la lección menciona las tentaciones de Jesús, registradas en Mateo 4:10. Aquí observamos que Jesús usó la Palabra de Dios como un arma contra el tentador. ¿Qué otros casos muestran que Jesús usó diversas partes de la armadura para protegerse de Satanás? Por ejemplo, sin la protección del escudo de la fe ni sostenido por su comunión con su Padre celestial (“orando en todo tiempo”, Efe. 6:18), Jesús no habría obtenido la victoria.

Podemos estar seguros de que Satanás usará contra nosotros las mismas tácticas que usó contra Jesús; atacará, se opondrá, nos ridiculizará y, tal vez haga que nos abandonen los más cercanos a nosotros cuando queramos hacer la voluntad de Dios.

Pregunta inductiva:

Una táctica es la tentación y el falso consejo. ¿Has recibido alguna vez un consejo que presentaba una manera más fácil de hacer algo? Sonaba bien, pero tenía solo una falla: se oponía a la voluntad de Dios. ¿Cómo te defiendes contra este tipo de ataques? ¿Qué lugar tiene la oración y el estudio de la Palabra para manejar la espada de la verdad?

 

PASO 4: ¡Crea!

Solo para los maestros: Anima a los miembros de tu clase a buscar la verdad en la Palabra de Dios. De este modo, pueden fortalecer su fe y luchar no contra los otros, sino con los otros contra las fuerzas identificadas en Efesios 6:12. Nuestra meta es estar unidos en la verdad revelada en la Biblia y dentro de la comunidad de creyentes, porque hay fortaleza en su número; sabemos que una de las estrategias clave de Satanás es volvernos unos contra otros.

Para meditar: Anima a la clase a pensar si en de la familia de cada uno, en el grupo de amigos o en la comunidad de la iglesia hay alguien contra el cual se abriguen sentimientos negativos, malos recuerdos, heridas y dolor no resuelto. Pregúntales qué aspectos de la Espada de la Verdad pueden ayudarlos en esas circunstancias. Anima a tu clase a descubrir en la Biblia qué consejo da Jesús a los creyentes para evitar peleas internas. Por ejemplo:

• En Juan 13:34 y 35, Jesús nos ordena amarnos “unos a otros”.

• También se nos instruye, en Lucas 17:3 y 4, que perdonemos. El diablo sabe que, si no perdonamos, no seremos perdonados.

• ¿Cuáles son otros ejemplos?

Si Satanás puede cultivar un espíritu de venganza, la raíz de amargura brotará dentro de nosotros y eso destruirá nuestra fe y espiritualidad, privándonos de nuestra armadura de luz.
Actividad: En Lucas 22:31 al 62 encontramos la negación de Pedro. ¿Qué podemos aprender del ejemplo de Pedro acerca de tener grietas en la armadura que llevamos puesta? Aquí encontramos a Pedro distraído por problemas de interés propio, y un deseo de reconocimiento y posición.

Nota: El ejemplo de Pedro tal vez muestra la mayor arma en el arsenal de Satanás. Lo que él usa para distraernos de Jesús, y así abandonar la armadura protectora de Dios, no es otra cosa que el “yo”.

• Pregunta a la clase: De todas las batallas que Satanás ha peleado, ¿cuál fue la más dura para ti?

• ¿Qué podemos aprender de la lección acerca del modo de permitir que Jesús tome el control completo como la clave para asegurarnos la victoria sobre Satanás?

• ¿Qué tácticas de batalla usó nuestro Salvador para ganar el conflicto de los siglos?