Lecciones para adultos: "El evangelio en Gálatas"

Edición para maestros. Tercer trimestre (julio-septiembre) de 2017

Lección 8: "De esclavos a herederos"

Para el 19 de agosto de 2017

 

Enseña a tu clase | Bosquejo de la Lección | Resumen
Ciclo de Aprendizaje:
Motiva | Explora | Aplica | Crea

 

El sábado enseñaré...

 

Enseña a tu clase a:

Saber: Repasar el proceso por el cual somos revestidos con Cristo en el bautismo y nos convertimos en herederos del reino de Dios.

Sentir: Sentir la intimidad de una relación padre/hijo con el Padre, por medio del Espíritu de Cristo en nuestros corazones.

Hacer: Vivir como hijo de Dios; no como menores restringidos por la ley, sino como personas libres de recibir completamente los derechos de la herencia.

 

Bosquejo de la Lección

1. Saber: Herederos, vestidos en Cristo

   1. ¿Cómo nos marca el bautismo en Cristo como hijos de Dios?

   2. ¿Por qué fue necesario que Cristo naciera de una mujer, bajo la ley, con el fin de liberarnos para convertirnos en sus hijos y herederos?

2. Sentir: Abba, Padre mío

   1. ¿Cómo invoca el Espíritu Santo, en nuestros corazones, la intimidad amante e informal entre un padre y un hijo que sabe que es amado?

   2. ¿Qué experiencias nos provocan ese tipo de amor cálido y lleno de confianza?

3. Hacer: Herederos del Reino

   1. ¿Cómo podríamos nosotros, que hemos sido hijos de Dios, volver a la esclavitud de las obras a cambio de favores?

   2. ¿Cómo nos vestimos diariamente en la muerte y resurrección de Cristo?

   3. ¿Cómo refleja nuestra lista diaria de cosas para hacer nuestro estatus como hijos de Dios y herederos de su Reino?

 

Resumen

Al vivir la vida de Cristo, se nos llama hijos de Dios. Nos dirigimos al Padre de una forma amorosa e íntima, con todos los derechos de aquellos que heredan el reino de Cristo gracias a sus dones, y no por nuestros propios méritos.

 

CICLO DE APRENDIZAJE

Concepto clave para el crecimiento espiritual: La vida, muerte, resurrección y ascensión de Jesucristo fueron los medios que Dios utilizó para liberar a los seres humanos del poder del pecado y la muerte y para hacernos volver a una relación correcta con él. Somos llamados a vivir libres en Cristo.

 

PASO 1: ¡Motiva!

Solo para los maestros: La siguiente historia real nos recuerda que la libertad dada a nosotros por Dios, por medio de Cristo, es uno de los dones más preciosos que la raza humana caída posee y debería celebrarlo como tal.

En abril de 2002, Ray Krone, un ex presidiario condenado a la pena capital, se convirtió en el centésimo prisionero de los Estados Unidos en ser exonerado por una evidencia de ADN, desde el momento en que la pena de muerte fue restablecida en 1976. Krone había pasado más de diez años en prisión por un asesinato que no cometió.

¿Cómo pasó Krone su primer día de libertad? Comió un asado, salió a nadar en la piscina del hotel y dejó oír un grito de regocijo exultante mientras el agua fría lo cubría. Casi inmediatamente después de su liberación comenzó a denunciar las falencias del sistema legal que le habían hecho perder la fe. Krone había sido sentenciado, no una vez, sino dos veces por el mismo crimen, la última vez a cadena perpetua.

Cuando se le preguntó cómo planeaba reconstruir su vida, Ray Krone respondió: “No pienso reconstruirla. Pienso comenzar de cero. Tengo una vida nueva, sueños nuevos... No quiero ser pesimista, vengativo o iracundo. No tengo tiempo para eso”.

Considera: Pide a la clase que considere las siguientes preguntas: ¿Cómo se ve la libertad en Cristo? ¿Cómo podemos saber cuándo la libertad es genuina y cuándo no lo es (si eso es posible)? ¿Qué verdad profunda acerca de nuestra nueva vida en Cristo se revela por medio de las palabras de Ray Krone acerca de comenzar de cero?

 

PASO 2: ¡Explora!

Solo para los maestros: Según lo aclara la lección de esta semana, los profetas del Antiguo Testamento se enfrentaron a la difícil tarea de exponer los pecados escondidos y no tan escondidos de la gente que a menudo aseveraba ser adoradora del Dios verdadero.

Comentario de la Biblia

I. Realmente muerto

(Repasa, con tu clase, Romanos 6:1-11, Gálatas 3:26, 1 Corintios 12:13.)

La lección de esta semana resume el papel crucial del bautismo en la transformación completa de la vida de un pecador. De acuerdo a lo estudiado el domingo, el bautismo representa una “decisión radical de unir nuestras vidas con Cristo.”

En Romanos 6:4, el apóstol Pablo le aporta algo más al significado del bautismo. Describe el proceso como uno en que los hombres son “sepultados con él en su muerte” (NVI). A menudo, este es uno de los conceptos más difíciles de entender: que a través del bautismo uno realmente ha muerto a su forma de vida pasada. Sin embargo, esta forma de entenderlo es la que Gálatas 3:26 predica.

En el bautismo, la muerte del creyente al pecado es tan real y completa como la muerte literal de Cristo. Así como la salida de Cristo de la tumba señaló un renacimiento total, así también nuestra salida de la tumba bautismal señala una nueva forma de vida en Cristo.
El bautismo representa una unión con Cristo. Pablo explica: “Todos fuimos bautizados por un solo Espíritu para constituir un solo cuerpo, ya seamos judíos o gentiles, esclavos o libres, y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu.” (1 Cor. 12:13, NVI)

Considera: ¿Por qué muchos creyentes luchan con aceptar la totalidad de su muerte en Cristo? ¿Cómo debemos entender el hecho de que, aunque estamos muertos al pecado, algunos pecados continúan desafiándonos? ¿Cómo usa Satanás esta tension entre la vida antigua y la nueva para desanimar al creyente?

II. ¿Inclusive el poder?

(Repasa, con tu clase, Gálatas 4:7 y Mateo 4:4-11.)

Uno de los aspectos verdaderamente inspiradores del ministerio de Jesús en la tierra fue el ejercicio natural de dominio sobre Satanás, comenzando con la tentación que soportó en el desierto (Mat. 4:4-11). Tal como lo aclara el autor en el estudio de esta semana, ya que somos herederos juntamente con Cristo, todo lo que le pertenece a él nos pertenece a nosotros, inclusive su poder. Parte de la libertad ofrecida por Cristo es una capacidad creciente para resistir y alejar el pecado en todas sus formas. Dios nos adoptó de la “esclavitud al pecado.”

Piensa por un momento en la incapacidad de Satanás de tener éxito sobre Jesús en cualquier situación, como lo describió aquí Elena G. de White: “Cuando Jesús vino al mundo, el poder de Satanás fue dirigido contra él. Desde que apareció como niño en Belén, el usurpador obró para lograr su destrucción. De toda manera posible procuró impedir que Jesús alcanzase una infancia perfecta, una virilidad inmaculada, un ministerio santo y un sacrificio sin mancha. Pero fue derrotado. No pudo inducir a Jesús a pecar. No pudo desanimarlo ni apartarlo de la obra que había venido a hacer en la tierra. Desde el desierto hasta el Calvario, la tempestad de la ira de Satanás lo azotó, pero cuanto más despiadada era, tanto más firmemente se aferraba el Hijo de Dios de la mano de su Padre y avanzaba por la senda ensangrentada. Todos los esfuerzos de Satanás para oprimirlo y vencerlo no lograron sino hacer resaltar con luz más pura su carácter inmaculado” (DTG 707).

Considera: Muchos cristianos no creen que, por medio de Jesús, ellos también pueden ser victoriosos sobre los ardides de Satanás. ¿Qué les impide experimentar la libertad del poder de algunos pecados? ¿Están destinados a luchar con ellos para siempre? Explica.

III. El testimonio viviente de Pablo

(Repasa, con tu clase, Gálatas 3:28, 4:12.)

El estudio de esta semana cierra con el pedido de Pablo de que los nuevos creyentes gálatas no regresen a los “principios ineficaces y sin valor” que una vez los esclavizaron (Gál. 4:9, NVI). Para Pablo, regresar al legalismo pasado sería equivalente a volver a la adoración pagana.
Pablo exhorta a su audiencia de gentiles a que se identifique con él como él se había identificado con ellos (vers. 12). Escondida en su aparente lenguaje sentimental está la verdad que Pabló reveló en Gálatas 3:28; que en Cristo no hay “judío ni griego, esclavo ni libre, hombre ni mujer, sino que todos ustedes son uno solo en Cristo Jesús” (NVI). Tal como veremos en el estudio de la próxima semana, Pablo en realidad adoptó algunas costumbres y formas de vida de los gentiles.

Uno puede imaginar solamente cómo este enunciado cayó en los oídos de los judíos que escuchaban a Pablo. Pablo rechazó enfáticamente cualquier separación entre él y los gentiles. La primera carta a los Corintios, capítulo 9, versículo 21, declara que Pablo se hizo como gentil para guiar a algunos a Cristo: “Entre los que no tienen la ley me volví como los que están sin ley (aunque no estoy libre de la ley de Dios sino comprometido con la ley de Cristo), a fin de ganar a los que están sin ley.” (NVI).

La libertad de Pablo en Cristo lo había despojado del campanilismo y lo había hecho estar dispuesto a compartir el amor de Dios a todas partes.

Considera: ¿Cómo deberíamos comportarnos al intentar darle forma a la unidad que compartimos con todos los hijos de Dios?

 

PASO 3: ¡Aplica!

Solo para los maestros: Como hijos e hijas adoptivas de Dios debemos aprender, de la vida del Padre, qué significa permanecer en él (Juan 15:1-7) y qué significa compartir su amor con los miembros perdidos de la familia (Mat. 28:18-20).

Preguntas para reflexionar:

1. ¿Qué rol tiene nuestra vida devocional en mantener nuestra libertad en Cristo? Lee Marcos 1:35-39. ¿Qué nos dicen estos versículos acerca de la vida devocional de Jesús y cómo influyó en la toma de decisiones a cada momento?

2. ¿Por qué algunos creyentes dudan de la realidad de su adopción en Cristo? ¿Cómo puede nuestra relación pasada con el pecado sabotear, a veces, nuestra relación futura con nuestro Padre?

Preguntas para aplicar:

1. ¿Cómo reconciliamos la libertad en Cristo con la enseñanza de la Biblia acerca de temas como la modestia al vestir, la conducta cristiana y la reforma prosalud? ¿Qué somos libres de hacer y/o no hacer?

2. ¿De qué maneras deberíamos seguir siendo como niños en nuestra caminata cristiana? ¿De qué formas deberíamos crecer hasta llegar a ser hijos e hijas de Dios completamente maduros?

Preguntas para testificar:

1. “Los discípulos debían ser colaboradores con su Redentor en la obra de salvar al mundo.” (El Deseado de todas las gentes, p. 757) ¿Qué dice nuestra disposición a trabajar por la salvación de los hermanos y hermanas perdidos acerca del amor que tenemos por el Padre?

2. Lee la parábola de la gran cena que se encuentra en Lucas 14:15-24. Jesús envió a sus discípulos, diciendo: “Ve por los caminos y las veredas, y oblígalos a entrar, para que se llene mi casa” (vers. 23, NVI) ¿Por qué está tan deseoso el Padre por compartir su generosidad con tanta gente como sea posible? ¿Cómo “obligamos” a la gente a venir a la gran celebración de adopción?

 

PASO 4: ¡Crea!

Solo para los maestros: Comparte el siguiente mensaje con tus alumnos y pregúntales cómo aplicarían las verdades aprendidas esta semana para satisfacer la necesidad del corazón en lucha de la persona a la que nos hemos de referir más abajo. Pide a tus estudiantes que hagan una lista de cosas que le dirían a esta persona.

Alguien publicó el siguiente pedido de ayuda en una página web cristiana: “A veces siento que Dios está a una galaxia de distancia. Supongo que mis pecados pasados simplemente continúan persiguiéndome. Aparentemente, no puedo olvidarlos. Y justo cuando pienso que está bajo control y no lo haré de nuevo, ¡bum! Pasa otra vez. Me equivoco. Es como si el Diablo me estuviera hostigando, diciéndome: ‘¿Pensaste que te podías escapar? ¡No puedes hacerlo!’ Y a veces siento que es cierto; que he caído tan bajo, tan lejos de la gracia de Dios, que no puedo volver. Yo sé que no es verdad, que Dios te encuentra donde sea que estés; pero a veces me pregunto si realmente me escucha”.