Guías o lecciones de la Escuela Sabática para el Estudio de la Biblia

Lecciones para adultos: "El Génesis"

Edición para maestros. Segundo trimestre (abril-junio) de 2022

Lección 3: "Caín y su legado"

Para el 16 de abril de 2022

 

Reseña | Comentario | Aplicación a la vida

 

Ir ArribaRESEÑA

Texto Clave: Génesis 4:7.

Enfoque del estudio: Génesis 4; Hebreos 11:4; Apocalipsis 6:9.

Introducción:

Génesis 4, el siguiente capítulo de la historia humana, presenta el primer nacimiento que anuncia la salvación mesiánica, y el primer acto de violencia y muerte. Los eventos dan una idea de cómo será la vida humana después de la Caída, es decir, una mezcla de vida y muerte. El nacimiento y el crimen se entrelazan. La estructura del capítulo 4 expresa esta tensión mediante la forma de su estructura quiástica, que alterna entre nacimiento y homicidio:

A. Nacen de Adán y Eva: Caín y Abel

B. Homicidio: Caín

C. Nacimiento: legado de Caín y Lamec

B1. Homicidio: Lamec

A1. Nace de Adán y Eva: Set

La estructura de Génesis 4 aporta varias lecciones. La salvación de Dios se abre paso a través de una serie de contrastes entre Caín y Abel, de sus nombres, su comportamiento y sus respectivos sacrificios, e incluso entre Caín y Lamec. Aunque los homicidios cometidos por Caín y Lamec ocupan todo el espacio, el capítulo está relatado con esperanza: comienza y termina con la promesa mesiánica. El capítulo comienza con el nacimiento de Caín y termina con el nacimiento de Set. Mientras que el nacimiento de Caín conduce al fracaso y tiene un horizonte limitado compuesto por logros humanos y violencia –lo que lleva al Diluvio–, el nacimiento de Set repara el fracaso anterior y restaura el plan de salvación de Dios, lo que conduce a la supervivencia de la humanidad en la historia y a su salvación.

 

Ir Arriba COMENTARIO

El nacimiento de Caín

Eva asocia el nacimiento de Caín con la presencia de YHWH. La mujer es la primera persona que menciona el nombre del Señor (YHWH). Ella creía que Dios mismo había descendido y se había convertido en Aquel a quien ella había dado a luz: “He dado a luz a un hijo varón: el SEÑOR” (Gén. 4:1, ISV, en inglés). Esta traducción literal se justifica sobre la base de la gramática, porque el nombre de Dios (YHWH) se introduce con la misma palabra, ’et, que introduce el nombre de Caín. De hecho, todos los nombres personales de este versículo, Eva, Caín y YHWH, comienzan con esta partícula. Además, la frase ’et Qain (“Caín”) es paralela a la frase ’et YHWH (“el Señor”). Estas dos frases se encuentran en el mismo lugar, al final de la proposición respectiva, y así se hacen eco entre sí. Además, el uso de la palabra ’et antes de “el Señor” marca un fuerte énfasis en el Señor.

Esta identificación es solo un indicio de cómo debieron haberse sentido Adán y Eva. Al recordar la promesa de Génesis 3:15, probablemente Eva pensó que había dado a luz a su Redentor. Elena de White interpreta este pasaje de esta manera: “Cuando Adán y Eva oyeron por primera vez la promesa, esperaban que se cumpliese rápidamente. Con gozo dieron la bienvenida a su primogénito, esperando que fuese el Libertador” (DTG 23).

Lee Génesis 4:1 y 2. Analiza el significado de los contrastes entre los dos hermanos. Caín nació primero, mientras que Abel nació segundo. El nombre de Caín significa “adquirir”, “poseer”, mientras que el nombre de Abel significa “vapor”, “efímero”, “vanidad”. Caín habla, mientras que Abel no habla nunca. Compara también sus ofrendas (ver a continuación).

El sacrificio de Caín (Gén. 4:3, 4)

Mientras que Caín decidió tomar su ofrenda solo del “fruto de la tierra” (Gén. 4:3), Abel “trajo también” su ofrenda (Gén. 4:4). Por lo tanto, en contraste con la ofrenda de Caín, la ofrenda de Abel se ajustaba a la ley que requería que se presentara un sacrificio animal para el holocausto (Éxo. 29:39-41). Sin embargo, si bien Abel cumplió con las instrucciones divinas, Caín decidió ignorarlas. Además, una comparación entre los dos actos de ofrendar revela un ligero matiz entre ellos. Mientras Caín ofrece “a Jehová”, Abel simplemente ofrece. La mención “a Jehová” está ausente en la descripción del sacrificio de Abel.

Esta pequeña diferencia tiene un significado profundo, ya que refleja dos conceptos de adoración radicalmente diferentes. Mientras Caín considera que su ofrenda es su regalo para Dios, Abel entiende su sacrificio como un recordatorio del regalo de Dios para él. Mientras Caín ve su religión como un movimiento ascendente hacia Dios, Abel la experimenta como un movimiento descendente de Dios. Esta mentalidad contrastante también puede explicar otra diferencia con respecto a cómo se eligieron las ofrendas. La ofrenda de Abel no era, per se, una ofrenda mejor que la de Caín. De hecho, el fruto de Caín pudo haber sido incluso un mejor producto que la oveja provista por Abel. Sin embargo, la diferencia estaba en que Abel eligió de entre las bejorot, las primicias, de los “primeros frutos”, el producto más precioso de la temporada, según la legislación mosaica (Éxo. 23:19), mientras que Caín tomó cualquier fruto de la tierra. En el contexto de los capítulos anteriores, cada una de las dos ofrendas evoca algo diferente. La ofrenda del fruto de la tierra (’adamá) apunta a Génesis 3:19, que se relaciona con el esfuerzo humano y la perspectiva de la muerte. La ofrenda animal, por otro lado, alude a Génesis 3:21 y brinda la promesa de la protección divina y la perspectiva de la vida. La ofrenda de Caín era la expresión del trabajo humano para acceder a Dios; la ofrenda de Abel expresaba la necesidad de salvación de Dios. Además, la ofrenda de Abel estaba relacionada con la promesa del Cordero mesiánico de Génesis 3:15, que sería sacrificado para salvar al mundo, mientras que la ofrenda de Caín era un ritual vacío. Observa el mismo contraste entre la ropa humana (Gén. 3:7), que usa la hoja de higuera, un vegetal, versus la ropa divina, que usa la piel de un animal e implica el sacrificio de sangre (Gén. 3:21).

El crimen de Caín

El uso de la frase vaiió’mer Qain, “y dijo Caín”, que se hace eco de la frase vaiió’mer YHWH 'el Qain, “Jehová dijo a Caín” (Gén. 4:6), indica que se suponía que Caín debía responder a Dios. Sin embargo, en lugar de responder a Dios por fe, Caín se vuelve hacia su hermano y lo mata (Gén. 4:8). Es significativo que el crimen cometido por Caín siga inmediatamente a este cambio en el diálogo: de la interacción vertical fallida a la horizontal. Por ende, se plantea el mecanismo del primer crimen religioso. Los crímenes de los celosos no se cometen porque crean que tienen razón; al contrario, los homicidios por fanatismo e intolerancia religiosa se deben a la falta de respuesta a la Palabra de Dios. Cuando se reemplaza la fe por el trabajo y el control humanos, habrá delincuencia. Caín mató a su hermano, no porque Caín creyera que tenía razón y que su hermano estaba equivocado, sino al contrario, porque Caín era malo y su hermano era justo (ver 1 Juan 3:12).

El crimen de Lamec

También hay un contraste entre el crimen de Caín y el crimen de Lamec. A diferencia de Caín, Lamec llevó el asesinato un paso más allá. Lamec presentó su asesinato como un acto positivo y valioso, y literalmente se jactó de ello. Mientras que Caín optó por permanecer en silencio, Lamec, al contrario, escribió una canción. Mientras que Caín pide misericordia a Dios (Gén. 4:13, 14), Lamec ignora a Dios y somete a sus esposas a una letanía de sus proezas y su hazaña homicida como si fuese digna de aprobación. El mismo cambio de paradigma que se observa en el crimen de Caín también se puede encontrar aquí: el fracaso en la relación vertical (Dios-hombre) da paso a un violento giro contra otro ser humano. De hecho, Lamec avanza en dirección contraria al perdón. Habla de venganza, aludiendo a delitos adicionales en el futuro. Y hasta redobla considerablemente su venganza. Mientras que Caín será vengado solo siete veces, Lamec exige un aumento de 77 veces (Gén. 4:24). Es admirable que Jesús juegue con la misma intensificación del número siete para exhortar al perdón (Mat. 18:21, 22).

El nacimiento de Set

La repetición de la primera frase que presenta el nacimiento del primogénito Caín (Gén. 4:1) sugiere una vuelta al comienzo. Además, la repetición de la frase “de nuevo” vinculada al nacimiento de Set se hace eco del “otra vez” asociado con el nacimiento de Abel (Gén. 4:2, JBS). Por lo tanto, la palabra “de nuevo” vuelve a conectar la línea de la historia interrumpida en este punto: Set reemplazará a Abel. Esta idea también se registra en el nombre del nuevo hijo, Set, que significa “poner en el lugar de”, como comenta Eva. Además, el verbo hebreo shat, “designado”, que describe la “designación” de la “simiente” en Eva, es el mismo verbo que describe la “designación” de Dios: “pondré” (shat) “enemistad” entre la serpiente y la mujer (Gén. 3:15). Mediante esta alusión a Génesis 3:15, el autor bíblico apunta proféticamente al hito de salvación manifestado en la encarnación divina de Jesucristo.

Pregunta de analizar y reflexionar. ¿Cómo señala el nacimiento de Set a Jesucristo?

 

Ir Arriba APLICACIÓN A LA VIDA

Caín y Abel. ¿Qué lecciones sobre el carácter podemos aprender del contraste entre Caín y Abel? Caín habla, mientras Abel calla. Caín es el primero, Abel es el segundo. Caín es violento, Abel es la víctima. ¿Con quién se identifican ustedes y por qué? ¿Por qué Abel representa a los mártires de Dios (Apoc. 6:9; 20:4)?

La ofrenda para Dios. ¿Qué lecciones de religión podemos aprender de la comparación entre la ofrenda de Caín y la ofrenda de Abel? ¿Qué es más importante: lo que recibimos de Dios o lo que le damos? ¿Por qué el regalo de Dios es la única forma de ser salvo?

El enojo de Caín. Lee Génesis 4:6 y 7; y Mateo 5:21 al 26. ¿Por qué se enojó Caín? Recuerda la última vez que te enojaste, analicen ese enojo y plantéense estas preguntas: ¿Cómo prepara el enojo al corazón humano para el asesinato? ¿Qué relación hay entre el fracaso religioso de Caín y su fracaso en la relación con su hermano? ¿Por qué el celo religioso a menudo conduce al asesinato? ¿Qué lección de dominio propio podemos aprender del mandato de Dios a Caín?

El crimen de Lamec. Comparen los crímenes de Caín y Lamec. ¿Cuánto se asemejan en degradación? ¿Cuán diferentes son en nivel o intensidad? ¿Qué lección podemos aprender de la sensibilidad de Lamec hacia los bellos poemas y la sensibilidad de su hijo hacia la música? La educación de las bellas artes, ¿nos protege de la maldad? Analicen. ¿Qué ejemplos de la historia indican lo contrario?

El nacimiento de Set. Después de que Caín mató a Abel, Dios levantó otra simiente justa, Set, por intermedio de quien podría cumplir su propósito de redimir al mundo. ¿Qué lección nos enseña este cambio de planes sobre la perseverancia de Dios para salvar, y su voluntad de trabajar con la humanidad frente a nuestras debilidades y fracasos?

Devoción

Logo Escuela SabáticaLecciones de la Escuela Sabática

Estudie la palabra de Dios a través de las Guías o lecciones de la Escuela Sabática.


Devoción Matutina

Jesús clamó y dijo: El que cree en mí, no cree en mí, sino en el que me envió; y el que me ve, ve al que me envió. Juan 12:44,45.


Libros de Lecturas Devocionales

- A Fin de Conocerle. Hoy con la lectura Servid al señor de todo corazón basada en Colosenses 3:23-24.

- Cada día con Dios. Hoy con la lectura Fábulas por arte compuestas basada en Daniel 8:14.


Club de Oración

Envíe su Pedido de Oración, sus peticiones serán tratadas de una forma confidencial.

Principal | Nosotros | Noticias | Recursos | Descargas | Devoción | Directorios

Iglesia Adventista del Séptimo Día de Santa Clara
Primer Sitio Cubano al Servicio de Cristo
©2002-2024
Contáctenos: iasdsantaclara@yahoo.es

Patrocinadores:
Ministerio PedrAngular
Craig Pettersen