31 mar 2012. Santa Clara, Villa Clara, Cuba [Coralia García]

Jóvenes adventistas extranjeros que estudian en Cuba realizaron la programación “Colaborando unidos con Jesús” en el templo de la Iglesia Adventista de Santa Clara el sábado 31 de marzo.

En esta oportunidad la programación estuvo dirigida por Cherry Lumai, de Zambia, y Anciano de Iglesia de la iglesia sede, y la Escuela Sabática por Ana Morales, de Costa Rica, y miembro de la Iglesia de Cienfuegos.

También contó este encuentro con cantos de alabanzas, de solistas, dúos, tríos, y cantos congregacionales y con minutos de salud. El sermón fue disertado por Cherry Lumai.

Los jóvenes presentes en este encuentro que actualmente militan en su estancia en nuestro país en las iglesias cubanas de Cienfuegos, La Habana y Santa Clara, proceden de diferentes países, entre ellos, Costa Rica, Zambia, Sudáfrica, República Dominicana, Belice, Honduras y Nicaragua.

Ellos se encuentran en Cuba estudiando diversas especialidades universitarias, como la Arquitectura y la Medicina, entre otras. Pero han creado un grupo llamado “Jóvenes adventistas extranjeros en Cuba”, cuentan con un liderazgo y estructura organizativa, un Manual y una planificación de sus actividades.

Los propósitos u objetivos de este grupo es vivir por Cristo en Cuba, formar un grupo íntimo de Jóvenes Adventistas Extranjeros en Cuba, para la amistad, ayuda y el apoyo espiritual y predicar el evangelio.

En el Manual estos jóvenes plantean, entre otros aspectos, que aunque se encuentran lejos de sus tierras natales reconocen que aquí entre hermanos pueden ser fortalecidos tanto espiritualmente como socialmente y que a su alrededor se le acercan miles de estudiantes que no disponen del amor de Cristo, por lo que son afortunados de tener una viña de cosecha para la causa de Dios.

Estos jóvenes son asimilados en nuestras congregaciones cubanas, mediante los trámites de traslados, conforme lo instituye nuestro Manual de Iglesia, por el tiempo que residan en nuestro país, que siempre es superior a los 6 meses, y como feligreses reciben el tratamiento y tienen las mismas opciones de liderazgo que un adventista cubano, son miembros de nuestra congregación.

Muchos de ellos ya han dado fruto en el cumplimiento de la misión que el Señor nos ha legado a todos ganando otras almas para Cristo tanto de otros países como cubanas.